Las primeras personas que apoyamos venían del Kurdistán, Afganistán y, sobre todo, Siria. Sin embargo, cada vez atendemos a más personas de diferentes países y actualmente trabajamos sin poner fronteras y atendemos a cualquier persona migrante que se acerque a nuestra sede en Alicante y nos pida ayuda.
Les orientamos y damos soporte de forma personalizada, dándoles apoyo en todos los aspectos de su vida cotidiana, formación, inclusión, integración, acceso a vivienda, alimentos, etc. Intentamos realizar este trabajo desde la cercanía y la confianza para que sientan como cálida la acogida a la nueva ciudad a la que han llegado.
Para llevar a cabo esta integración, contamos de forma permanente con un grupo de voluntarias que dan clase de apoyo escolar a los peques y clase de español para mujeres, y simultaneamos estas clases para que las mujeres con hijos tengan más posibilidades de acudir.
Además, apoyamos puntualmente a aquellas personas que quieren acceder al carnet de conducir, cursos u otro tipo de formación.